Todo lo que debes saber del subidón si es tu primera vez con el cannabis

¿Estás pensando en usar cannabis medicinal y no estás seguro de cuáles son las mejores condiciones para automedicarse? ¿O simplemente sientes la curiosidad de averiguar por ti mismo qué efectos puede producirte el cannabis? ¿Lo has probado ya y te preguntas qué pasó? ¡Aquí estamos para ayudarte!

¿Estás pensando en probar los efectos a nivel cerebral, o subida, y a nivel corporal del cannabis por primera vez y en experimentar el estado alterado de percepción que conllevan? ¿Padeces alguna enfermedad o trastorno que se haya demostrado que se alivia utilizando cannabis medicinal, pero como no lo has consumido nunca antes, no estás seguro de las cuáles son las mejores condiciones para automedicarse por primera vez?

Es igual de importante prepararse adecuadamente para el consumo recreativo de cannabis. ¿Tienes curiosidad por saber de qué va todo esto? ¿Quieres descubrir por ti mismo qué efectos tendrá el cannabis en ti? ¡Equípate correctamente para probar el cannabis por primera vez con nuestras trece principales cosas que deberías saber antes de tu primera experiencia con el cannabis!

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¿Estás seguro de que es un buen momento para tu primera experiencia con cannabis?

¿En general, te sientes bien contigo mismo? ¿Está descansado, sin hambre y en buena compañía? ¿Tienes un poco de cannabis de calidad del que estás seguro que es la variedad que querías probar? Si es así, probablemente sea un buen momento.

¿Tienes algo que hacer más tarde? ¿Te sientes estresado, triste o tienes ansiedad? ¿Has bebido o estás bajo los efectos de alguna otra sustancia? ¿Estás rodeado de personas desagradables que no hacen más que discutir? Entonces no es un buen momento y probablemente deberías dejarlo para otro rato.

¿Es este un buen sitio para probar el cannabis por primera vez?

El sitio y el entorno son de vital importancia. ¿Estás en casa o en otro sitio en el que te sientas seguro y cómodo? ¿Hay algún lugar donde puedas tumbarte un rato si te apetece? ¿Hay algo para comer y beber? ¿Puedes elegir la música y la iluminación? ¿Estás con gente de confianza? Si la respuesta a todas estas preguntas es “¡Sí!”, parece que se trata del mejor sitio para probar el cannabis por primera vez.

¿Te encuentras en un lugar extraño con gente que no conoces? ¿Tienes que disimular que no te encuentras en un estado alterado por alguna razón? ¿Es bastante probable que tengas que marcharte antes de lo previsto? ¿Vas a tener que subir o bajar escaleras a las que no estás habituado? ¿No hay fruta ni nada para picar? Si la respuesta a todas estas preguntas es “¡Sí!”, probablemente deberías reconsideres tus planes.

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Puede que no sientas nada

A diferencia de otras muchas sustancias que pueden hacer efecto de forma bastante drástica, el cannabis puede sorprenderte poco a poco. Los efectos de una dosis pequeña pueden ser sutiles. Si has sido prudente y te lo has tomado con calma la primera vez, ¡puede que no sientas nada!

El reputado experto en cannabis, Lester Grinspoon, escribió su innovador libro “Marijuana Reconsidered” antes incluso de probar el cannabis. La primera vez que lo hizo no sintió ningún efecto. Sin embargo, siguió intentándolo. Hasta el punto en que cuando estaba en la cocina de un amigo hablando, riendo y devorando una pizza que le supo mejor que ninguna otra pizza en su vida, se dio cuenta de que estaba bajo los efectos del cannabis por primera vez. Así que si quieres «disfrutar del cannabis como un experto», prepárate para ser como el Dr. Grinspoon e invierte tiempo en varios intentos para disfrutar de todo lo que ofrece la planta.

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Nunca pruebes el cannabis con el estomago vacío: cannabis, hipoglucemia e hipotensión ortostática

Muchos consumidores inexpertos sufren una caída de la presión arterial repentina y que deja incapacitado, lo que puede llevar a un colapso físico y a la pérdida del conocimiento (hipotensión ortostática o postural) si no se trata de inmediato. Por esta razón, es importante no consumir cannabis con el estómago vacío. El aumento de la frecuencia cardíaca que resulta generalmente hace que la sangre circule más rápido, diluyendo la insulina en el flujo sanguíneo y afectando a la capacidad del cuerpo para metabolizar la glucosa.

La regla 15:15 mantiene que consumir 15 gramos de azúcar y esperar 15 minutos devuelve de forma efectivala glucosa en sangre a niveles normales.

Si el estómago está vacío, la falta de azúcar disponible para que la insulina existente se descomponga causa hipoglucemia (una disminución repentina del azúcar en la sangre). Se cree que existe una relación entre la hipoglucemia y la hipotensión ortostática, ya que se sabe que muchas personas que padecen de hipotensión ortostática recurrente tienen bajos niveles de glucosa en sangre.

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Si experimentas estos síntomas después de consumir cannabis, no te pongas nervioso. Sentarse en una posición cómoda mientras se bebe a sorbos agua con azúcar normalmente devolverá el azúcar en sangre a niveles normales al cabo de poco tiempo.

Las personas que siguen consumiendo cannabis suelen advertir que mientras que la tolerancia a la dosis aumenta con el tiempo, la frecuencia y la intensidad de este tipo de capítulos disminuye rápidamente. Sin embargo, si los síntomas persisten, puede ser recomendable la atención médica ya que la reaparición de dichos síntomas puede indicar que existe una enfermedad subyacente.

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Los dos efectos secundarios probablemente más conocidos y más temidos son la paranoia y «sufrir una pálida» (ver arriba). La paranoia puede provenir de una percepción aumentada de tu entorno y de la gente que te rodea. Esto se aplica sobre todo si te encuentras en un lugar donde el cannabis es ilegal y presentar un estado alterado no suele ser aceptado (a menos que lo cause el alcohol). Estos factores solos pueden ser suficientes para causarte una sensación de malestar y la impresión de que todo el mundo te está observando y hablando de ti.

Si has elegido un buen entorno para tu experiencia (ver 2. «¿Es este un buen sitio para probar el cannabis por primera vez?» arriba), deberían disminuir el número de cosas que podrían causar paranoia o angustia. Puede sorprenderte lo efectivo que resulta decirte a ti mismo con firmeza «Todo el mundo está demasiado ocupado pensando en lo que los demás piensan de ellos como para pensar en mí».

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Las sensaciones de paranoia suelen indicar la aparición de una pálida. Cuando los efectos del cannabis no son familiares, pueden provocar ansiedad fácilmente. Un alto grado de ansiedad puede exacerbar la paranoia y provocar una pálida. La mejor manera de lidiar con esto es tener algo de azúcar y carbohidratos a mano. El humilde plátano es perfecto para resolverlo si empiezas a notar que te tambaleas. Tumbarse y taparse para mantener el calor del cuerpo también es muy útil.

Muchos consumidores de cannabis con experiencia (incluido quien aquí escribe) todavía de vez en cuando calculan mal la dosis, el entorno o los niveles de azúcar en la sangre, y experimentarán las mismas sensaciones de náuseas, desmayos y visión de túnel que un novato. La principal diferencia es que el principiante puede perder los nervios y preguntarse dónde terminará, mientras que el experto se acostará y pedirá algo de comer.

Tu percepción puede no verse alterada de formas que esperabas

Debido a casi un siglo de información equivocada sobre el cannabis, cabría esperarse alteraciones mucho más pronunciadas de tu conciencia que las que se pueden alcanzar solo con el cannabis. Los efectos del cannabis se retratan como igual de dramáticos que los del LSD, sobre todo en los medios de comunicación. Pero no es cierto.

Con una dosis apropiada, no creerás que puedes volar. No experimentarás vívidas alucinaciones de cosas que no están ahí. No te verás poseído por un repentino deseo de correr desnudo por la calle. Igualmente, no dejarás de ver cosas que sí están ahí, como tus amigos o tu entorno. De hecho, te darás cuenta de que percibes cosas que nunca antes había visto de forma consciente.

No mezcles sustancias

Aunque el cannabis es más seguro que la mayoría del resto de drogas recreativas, tomar la decisión de probarlo por primera vez cuando ya te encuentras en un estado alterado es una mala idea. El alcohol es el culpable más habitual y posiblemente el peor. Si no estás acostumbrado a los efectos del cannabis, los efectos del alcohol nublarán tu percepción y no sabrás hasta qué punto te está afectando. Lo más probable que te desorientes y vomites en lugar de disfrutar de una experiencia nueva y agradable. Los medicamentos con receta también pueden interactuar con el cannabis (ver el punto 10).

Tu percepción puede verse alterada de formas que no esperabas

Nuestra percepción del tiempo, el color, el sonido, el sabor, el reconocimiento de patrones y la conciencia espacial se ven todas alteradas por el cannabis. Dependiendo de la cantidad y de lo fuerte que sea el cannabis que consumas, puedes experimentar estas alteraciones en mayor o menor grado. También puedes sentir estos efectos de forma más clara dependiendo de lo que estés haciendo. Si no estás seguro de estar o no sintiéndolos, prueba a escuchar una canción que te guste, a observar una obra de arte, jugar a algún juego, comer algo o simplemente poner la funda del edredón.

También puede que experimentes la tan parodiada pérdida de memoria a corto plazo que produce el THC, aunque en realidad no es más que como cuando vas de una habitación a otra preguntándote qué habías venido a hacer a esta habitación, o como cuando pierdes el hilo de tus pensamientos porque algo te ha distraído.

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¿Cómo sé cuándo he consumido demasiado cannabis?

Para tus primeros experimentos con cannabis, el mejor consejo es: en cuanto sospeches que estás experimentando los efectos del cannabis por primera vez, ¡deja de consumir de inmediato! Espera de 15 a 20 minutos para ver cómo se desarrollan las sensaciones y si te gusta lo que estás experimentando. Espera hasta que las sensaciones empiecen a desaparecer antes de consumir más cannabis.

Si te estás divirtiendo y asumes que consumir más enseguida equivaldrá a más diversión, puedes encontrarte mal fácilmente, al igual que con el consumo de alcohol.

Por desgracia, puedes pasar de disfrutar tu experiencia con el cannabis a no pasar un buen rato muy rápido. Por eso, recomendamos aumentar gradualmente la dosis para comenzar. Comienza despacio. Siempre estás a tiempo de colocarse más. Colocarse menos es más difícil.  

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¿Qué se siente con una sobredosis de cannabis?   

Puede que empieces a sentirte mareado, que tengas ganas de vomitar y sensaciones como de vértigo. Es habitual sentir frío, tener sudores y temblores. La sangre abandona la cara y te quedas muy pálido. Esta es la razón por la cual los efectos desagradables del consumo excesivo de cannabis se conocen como «sufrir una pálida».

A veces puede producirse una especie de visión de túnel, o un sonido que se convierte en un ruido blanco, o ambos. Si ocurre esto, lo normal es vomitar a continuación.  No te asustes. Aunque es posible tener una sobredosis de cannabis, es imposible morir de una sobredosis de cannabis.

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Ten en cuenta cualquier enfermedad médica o psicológica que padezcas

¿Eres diabético? ¿Hay antecedentes de enfermedades mentales en tu familia? ¿Padeces depresión? ¿Estás tomando algún medicamento? ¿Tienes algún problema pulmonar? Como el cannabis es tanto una medicina legítima como una sustancia recreativa, no hay que subestimar su interacción con otros medicamentos y enfermedades. Consulta a tu médico si sabes o sospechas que existe cualquier factor que pudiera descartar un uso sano y seguro del cannabis.

Se sabe que ciertos problemas de salud preexistentes se ven afectados por el cannabis de distintas maneras. Entre dichos problemas, se incluyen la epilepsia, hipertensión, migraña, esquizofrenia y muchas más. La comunidad médica enseguida tiene a su disposición nueva información sobre cómo se producen estos efectos. Sin embargo, el consenso todavía no se ha alcanzado en muchos casos.

Por ejemplo, se ha sugerido que el THC en dosis bajas es un tratamiento muy efectivo para la depresión, mientras que en dosis altas, el beneficio puede anularse y la depresión puede exacerbarse. Se ha propuesto un efecto dependiente de la dosis para varias otras enfermedades, como la esquizofrenia, la artritis (y otras enfermedades inflamatorias) y la hipertensión, no solo en respuesta al THC sino también al cannabidiol (CBD), otro cannabinoide de gran importancia médica.

Hay muchas evidencias que sugieren que la dosis y la proporción de cannabinoides son de suma importancia cuando se trata del consumo de cannabis medicinal, y que el método de consumo elegido también puede marcar la diferencia en los beneficios. Esta es otra razón para buscar asesoramiento médico profesional siempre que sea necesario.

Investiga y decide qué método te va mejor para consumir cannabis por primera vez

Aunque fumar cannabis sea la forma más frecuente de consumo, es uno de los métodos menos sanos. La ventaja para los que consumen cannabis por primera vez es que la dosis es más fácil de controlar y se puede incrementar poco a poco hasta alcanzar el efecto deseado.

Sigue habiendo polémica con respecto al daño inherente de fumar cannabis. Varios estudios han concluido que fumar cannabis puede ser un factor de riesgo para el cáncer de pulmón, igual que el tabaco. Sin embargo, muchos de estos estudios han investigado a personas que fuman cannabis y tabaco, y no han podido controlar adecuadamente los efectos del tabaco.

Otros estudios han indicado que fumar cannabis de alta calidad no conlleva un riesgo adicional de cáncer o enfermedad pulmonar, y que fumar de hecho puede ser un método muy efectivo para ciertas afecciones debido a sus efectos inmediatos.

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El asma puede ser una de esas afecciones. No obstante, para minimizar cualquier posible riesgo de causar irritación pulmonar por la combustión de alquitranes y otros compuestos que pueden estar presentes en la materia vegetal, el uso de un vaporizador es una alternativa más segura y efectiva. Además de la vaporización, aquellos que buscan métodos alternativos de consumo pueden optar por la aplicación sublingual (generalmente en forma de tintura), «medibles» (productos comestibles medicinales) para el consumo oral e incluso cannabinoides aislados farmacéuticamente como Marinol.

Obviamente, comerlo no irrita los pulmones, pero es mucho más difícil calcular la dosis, los efectos tardarán más tiempo en manifestarse y más tiempo en desaparecer. Un error común es comer demasiado por creer que no produce ningún efecto y, dos horas más tardes, ver que hace efecto de repente. Los vaporizadores ofrecen la mejor forma para muchas personas y ahora son mucho más fáciles de conseguir que antes.

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